Métodos y tipos de cocción
La cocina es un arte que permite dar rienda suelta a tu creatividad de muchas formas. Puedes idear muchos platos y disfrutar de muchas recetas, pero es importante que tengas claros los distintos tipos de cocinado que hay en la cocina. ¿Comenzamos?
En primer lugar, vamos a hablarte de la cocción en seco, es decir, en ausencia de líquido.
En este tipo de cocción se añade únicamente pimienta o algunas especias para jugar con los sabores. En este caso, la comida se prepara mientras está en contacto directo con la fuente de calor, como puede ser en el fuego en una parrilla, o en donde el ambiente está seco, como un horno, o con una freidora de aire.
Otro tipo de forma de cocinar es la cocción en un medio graso como puede ser el aceite, aunque aquí debes tener claro que no es lo mismo echar algo de aceite para cocinar unas verduras, que freir unas patatas en placa de inducción o vitrocerámica.
Si te vas a decantar por este tipo de cocinado, debes tener en cuenta estas consideraciones:
- No reutilices demasiado el aceite.
- Al sacar los alimentos, déjalos sobre un papel de cocina para que esta absorba una buena parte de la grasa.
- Ten mucho cuidado cuando estés cocinando con aceite, sobre todo si estás usando una cantidad media-alta para evitar las posibles quemaduras.
- No metas en aceite alimentos mojados o congelados dentro del aceite caliente, esto hará que salte más. Antes de freírlo, seca el producto con toallas de papel.
Otro de los métodos del que te vamos a hablar es la cocción por calor húmedo.
Podemos hablar de las técnicas al vapor, comidas al baño maría, hervidas… En este caso la temperatura es muy importante ya que algunas preparaciones requieren alcanzar el punto de ebullición, pero otras no necesitan alcanzar una temperatura tan alta.
Cocinando al vapor preservamos texturas, sabores y nutrientes que de otra manera pueden perderse fácilmente y que nos conviene aprovechar.
No todos los alimentos responden igual de bien a la cocina con vapor. Por ejemplo, debes tener en cuenta que las carnes son algo complicadas de manejar con esta técnica, mientras que las verduras, hortalizas y gran parte de los pescados dan unos resultados magníficos con gran facilidad si optas por este tipo de cocción.