Los congeladores son muy prácticos para almacenar alimentos que no vamos a consumir en el momento, pero, ¿sabes exactamente qué alimentos se pueden congelar y cuáles no ?
Llega el verano y ahora más que nunca, apetece consumir frutas. Son deliciosas, tienen muchas propiedades, son fresquitas y apetece consumirlas solas, en batidos o zumos.
En Lett, además de ofrecerte electrodomésticos de calidad y que hacen mejor tu vida, también queremos asesorarte para que tengas una cocina fantástica. Hoy queremos daros algunas pinceladas que harán que disfrutes mucho más de este espacio de la casa.
Seguramente ya sabes que existen muchos trucos para quitar el mal olor de la ropa, y la mayoría de ellos se hacen con remedios caseros. Aunque no sean nuestros favoritos, muchas veces funcionan.
El reciclaje es una excelente manera de comprometernos con el cuidado del planeta. En este sentido, hay que tener unas normas claras para su éxito: reducir, reciclar y reutilizar.
Hay alimentos que se pueden congelar sin ningún tipo de duda, y otros que a la hora de meterlos en el congelador, generan más incertidumbre. Hoy vamos a hablar precisamente de estos últimos. Quizás ni siquiera te habías planteado que se pueden congelar, pero verás como hacerlo hace la vida más fácil en tu cocina.
La gran mayoría de nosotros tenemos tápers en casa ya que son muy prácticos para llevarnos los alimentos cuando salimos de casa, para el almuerzo de los niños en el colegio, o para guardar lo que nos ha sobrado en la comida o la cena.
Para lograr un mundo mucho más sostenible, es importante tener día a día pequeños gestos que ayuden a evitar un consumo desmedido. Por ejemplo, tirar alimentos no solo supone desperdiciar el dinero, también contribuye de forma negativa al cambio climático debido a las emisiones de gases de efecto invernadero creados en su producción.
Este problema se puede atajar con una óptima organización en tu cocina, ¿te unes?
El lavavajillas es un electrodoméstico que te ayuda en las tareas diarias de tu hogar y su uso además reduce el consumo de agua en el hogar frente al lavado de platos tradicional.
