¿Cómo lavar tu ropa en vacaciones?
Por muy bien que hayas planificado el viaje y tu maleta, siempre pueden surgir imprevistos que te hagan tener que lavar tu ropa fuera de casa.
Es conveniente que al irte de casa contemples esta opción por lo que es buena idea incluir siempre en el equipaje un quitamanchas y un bote con jabón líquido.
No ocupan apenas espacio en la maleta y te pueden sacar de más de un apuro. Si no quitan la mancha totalmente, al menos te ayudará a que desaparezca levemente y sea más fácil eliminarla en la lavadora.
A la hora de hacer la maleta, decídete por prendas ligeras que no se arruguen mucho y hechas con tejidos que se sequen rápido. Tendrás que tenderlas poco tiempo para que se sequen y, además, si las lavas no tendrás que plancharlas antes de poder ponerlas. .
Hoy en día, es muy frecuente quedarse en apartamentos vacacionales, y normalmente disponen de lavadora, así que es un problema solucionado, y si te quedas en un hotel, pregunta si tienen servicio de lavandería, una opción perfecta para las manchas más difíciles.
Si te toca lavar a mano, recuerda estas claves:
Ten disponible una opción para lavar y otra para aclarar. Asegúrate de que ambos espacios están limpios.
Si hay una mancha difícil, antes de lavar aplica quitamanchas y frota con cuidado para eliminar todos los restos posibles. Después, llena ambos recipientes con agua fría o tibia para que las prendas no encojan y déjalas a remojo unos diez minutos con un poco de detergente líquido.
Para el proceso de lavado en sí, da vueltas a la ropa, moviéndola y frotando las zonas más sucias con un poco más de detergente. Pasados unos minutos pasa la ropa al segundo espacio y enjuaga las prendas para quitarles el jabón. Repite el proceso dos o tres veces, renovando cada vez el agua de los recipientes, y después déjalas en remojo 5 minutos más.
Cuando termines escurre el agua sobrante, extiende una toalla en el suelo o sobre una mesa y coloca la ropa sobre ella. Enróllala sobre sí misma para quitar el agua acumulada. Una vez hecho esto, tiende la ropa para que se seque más rápido, a ser posible en el exterior.